La de malas, se descompuso «La Mirru»

Pues a todos los que contamos con un automovil nos llega tarde que temprano, el momento que nuestro vehículo que por una cosa u otra, se nos descompone. Pues bueno, en esta ocasión me tocó a mi 🙁

Unas tres cuadras antes de llegar a casa, se le reventó una manguera a «La Mirru» (mi carrito de batalla) provocando la salida del agua y calentamiento del auto, tomé la decisión de seguirle ya de una vez hasta la casa y ahí repararla. Cuando me estacione en la casa llegué cual nave espacial rodeada de vapor y un sonido de vapor escapando, algo así como TSSSSSSSSSSS 😀

En la semana, traté de arreglar mi carrito pero erá mucho más que unas cuantas mangueras, hubo que cambiar el termostato y la bomba del agua y eso ya requería de más tiempo y herramientas (Que no tengo), lo bueno es que el mecánico de mi confianza no me cobró mucho por su mano de obra (más bien de sus chalanes), lo que si me salió un poco caro fueron las piezas. Me dijo el mecánico que pudo haber sido peor si por la calentada se hubiese dañado la maquina 😮

Cuando voy al mecánico, no soy de esos que tan solo dejan su vehículo y se van para despues solo pasar a pagar y llevarse su coche ya arreglado. En lo personal (y si tengo tiempo) procuro no despegarme del auto mietras lo arreglan para de esa manera aprender aunque sea un poco y además enterarme de primera mano de «los males» que mi automovil pudiese tener.

Cuando tú y tu familia ya están acostumbrados a andar en automovil, es feo quedarse «a pincel» 🙁