Un día caminaba muy triste por ahí, pero te encontré…

No hay peor sufrimiento que el sentirse solo y abandonado por aquellos en los que confiabas, pero…. recuerda que SIEMPRE estará EL esperandote y cuidando tus pasos. Déjalo entrar a tu corazón y la dicha estará por siempre contigo, aún y cuando todos te abandonen.

No sé… pero tuve la necesidad de llenarme de ti.

Un abrazo, para Uds. mis amables lectores.

Acerca de Faro Viejo

Contador Publico que en tiempos libres se convierte en un autodidacta en cuestiones informaticas. :-)

Ver todas las entradas de Faro Viejo →

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *